Germinar Semillas de Cannabis – Guía para el éxito
Las semillas de cannabis son un pequeño núcleo, que si recibe las condiciones adecuadas, germinará y crecerá para convertirse en una planta saludable. Sin embargo, si las manos que intentan darle vida son inexpertas, puede que en esta primera etapa no se brinden las condiciones necesarias y no se desarrolle correctamente. Por lo que germinar semillas de Cannabis puede suponer un reto para la mayoría.
En la naturaleza, el proceso de germinado de las plantas suele comenzar en la primavera, cuando los suelos húmedos comienzan a calentarse y la intensidad y las horas de luz solar aumentan. Estas son las condiciones que las semillas esperan para comenzar a crecer bajo tierra, donde están protegidas de la luz y de algunos depredadores.
Primeros Pasos.
Lo primero que debes hacer, es elegir bien tus semillas: debes evitar las semillas verdes o muy blandas. Una semilla saludable se caracteriza por su color marrón con líneas atigradas, si le aplicas un poco de presión es dura al tacto y seca. Si se siente débil, húmeda o de aspecto claro, puede tratarse de una semilla sin desarrollar, por lo que no germinará, o en caso de hacerlo no producirá una planta sana.
Una vez escogidas las semillas sanas, comienza el proceso de germinación, no hay un sólo método universal. En Cannaland te explicaremos tres métodos para que germines tus semillas con el 100% de éxito, y lo que necesitas para empezar y hacer crecer sana y saludable a tu planta.
Recuerda que luego de germinadas, deberás mantener las semillas en semisombra, evitando el sol directo durante los primeros tres días.
Germinar Semillas de cannabis en Servilletas.
Este es el método de germinación por excelencia de nosotros en Cannaland por su efectividad, su coste, y lo sencillo que resulta:
Vas a necesitar:
-Servilletas.
-Un contenedor de plástico con tapa (Preferiblemente opaco) o dos platos.
-Agua.
-Semillas de la cepa de tu preferencia.
-Peróxido de hidrógeno (Agua Oxigenada).
-Pulverizador (Opcional).
Pasos a Seguir:
- Coloca 3 o 4 servilletas en el fondo del contenedor o plato y rocía un poco de agua con agua oxigenada (En partes iguales) hasta humedecer las servilletas evitando empapar. Note preocupes si te excedes, siempre puedes escurrir el sobrante de líquido.
- Coloca las semillas sobre las servilletas y rocíalas, recuerda tener un mínimo de separación entre ellas para evitar que al crecer sus raíces, se enrrollen.
- Humedece otra capa de unas 3 o 4 servilletas más (recuerda evitar que queden empapadas), y colócala sobre las semillas.
- Coloca la tapa del contenedor (o el segundo plato), preferiblemente déjala semiabierta y colócalo en un lugar oscuro.
- Las servilletas no deben secarse por completo, ni estar empapadas. Lo mejor es rociar con un poco de agua limpia y pura tres veces al día. Por ejemplo, en la mañana, al mediodía y en la noche, para asegurar que estén húmedas, sin excesos.
- El momento óptimo para trasplantar es cuando su radícula (raíz) alcance entre 1 y 1,5cm de largo. Si se dejan mucho más tiempo, será más difícil de manejar, ya que puede romperse la raíz o incluso puede llegar a podrirse.
- Por último, deberás conseguir contenedor pequeño con sustrato (cerca de 5x5cm), al que le harás un pequeño agujero de unos 1,5cm. Donde colocarás tu semilla con la raíz hacia abajo, y la cubrirás con un poco del sustrato.
Consejo, la semilla deberá quedar a unos 0,5cm de la superficie.
Recuerda que el sustrato deberá permanecer húmedo, por lo que deberás seguirlo rociando unas tres veces al día con agua pura y limpia (evitando empapar), hasta que el mismo tenga su primer par de hojas reales (No cotiledones). Este nivel de humedad es importante para la salud y la vida de nuestra plántula.
Germinar semillas de cannabis en agua y turba.
Después del método de la servilleta, éste método es el segundo que no nos ha quedado mal en absoluto, y es muy sencillo de llevar a cabo, con un coste medio.
Vas a necesitar:
-Un contenedor de plástico pequeño (puede servir un pequeño vaso desechable).
-Agua.
-Semillas de tu preferencia.
-Peróxido de hidrógeno (agua Oxigenada).
-Jiffy o Turba Suelta Enriquecida.
-Un contenedor de 5x5cm – 7x7cm (Aprox.).
Pasos a Seguir:
- Llenar hasta la mitad el contenedor pequeño de plástico (o vaso), y colocar una cucharadita de agua oxigenada.
- Colocar la semilla en la mezcla en un tiempo entre 8 a 12 horas (máximo) para hidratarla, y colocar en un lugar completamente oscuro.
- Al pasar el tiempo, la semilla debería estar en el fondo del vaso, si no lo ha hecho aún, debería poder hacerlo si le das un ligero toque con la mano. Una semilla que no se haya sumergido o no logre hacerlo al pasar el tiempo en el agua, difícilmente será viable.
- Humedecer el Jiffy, o Turba, colocarla en el contenedor de 5x5cm y abrir un agujero de 0,5cm en el centro.
- Una vez húmedo, colocar la semilla con la parte puntiaguda hacia abajo en el agujero (puedes ayudarte con unas pinzas). Deberás cubrirla con un poco más de turba y rociar un poco de agua sobre ella.
- La turba es un sustrato ligero, el cual se seca con bastante rapidez, por lo que deberás humectarlo con agua limpia dos o tres veces al día, evitando dejar que seque por completo.
- Luego de unas tres semanas, podrás trasplantar a su recipiente intermedio o directamente a su recipiente final.
Germinar Semillas de cannabis en Sustrato (Tierra).
Este es el método de germinación de menor costo, ya que se realiza directamente en el sustrato. Sin embargo, tiene mayor complejidad, puesto que no posees un control del crecimiento de la raíz de la semilla, ni de su estado general. Como siempre, te recomendamos hacer uso de nuestro sustrato especial para Cannabis, Cannamix, con lo que tus plantas gozarán de un crecimiento explosivo.
Vas a necesitar:
-Sustrato (Tierra)
-Un contenedor plástico o biodegradable de 5x5cm – 7x7cm (Preferiblemente opaco).
-Agua
-Semillas de tu preferencia
-Pulverizador (Opcional)
Pasos a Seguir:
- Coloca el sustrato en el contenedor y humedécelo hasta que comience a escurrir.
- Realiza un agujero en el sustrato de 0,5cm e introduce la semilla en el mismo, con la parte puntiaguda hacia abajo, cubre con un poco más de sustrato y rocía un poco de agua.
- Dependiendo del tipo de sustrato, la frecuencia de secado será mayor o menor.
- Se recomienda regar entre una a dos veces al día sin empapar y a su vez, evitando que seque por completo.
Recuerda que la mejor forma de hacer crecer tus plantas, y darles la mejor salud es teniendo un control de las condiciones climáticas que podrían afectarlas. Entre ellas se encuentra la temperatura, la humedad, la cantidad de luz, el PH de la tierra, entre otras variables importantes. Si no conoces cómo cuidar una plántula de cannabis, haz click aquí.
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