Semillas de Cannabis: ¿Cómo obtenerlas?
Al momento de incursionar en el autocultivo, generalmente surgen muchas dudas y nos dejamos guiar por muchos mitos, como cuando dicen que si tienes una planta hembra cerca de un macho, la hembra también se convierte en macho. Nada más alejado de la realidad. En Cannaland queremos desmitificar ciertas cosas, por lo que hoy te explicaremos lo que sucede al juntar una planta hembra con una macho. Lo primero que debes saber, es que las plantas de cannabis son dioicas. Esto quiere decir que necesitamos que una planta hembra reciba el polen de una flor macho para la creación de semillas en sus cálices.
¿Cómo conseguir tus propias semillas de Cannabis?
Cuando hablamos de cultivar cannabis, siempre buscamos que sean flores hembra, ya que son las hacedoras de las deliciosas flores resinosas que terminaremos por quemar. Nos centramos tanto en las plantas hembra, que en el momento que obtenemos una planta macho, lo vemos como lo peor que podría pasarnos.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que las plantas macho son tan importantes como las hembra al momento de reproducir una variedad o intentar crear una nueva Cepa. Esto se debe a que producen polen, que es necesario para que la flor hembra sea fecundada y logre crear semillas. Quiere decir que este polen desempeña un papel importante en el proceso de cría, ya que permite combinar los genes de diferentes variedades.
Pero, ¿Qué es el polen?
El polen producido por el cannabis es muy parecido al polen de cualquier otra flor de otras plantas. Se trata de un polvo color amarillo/dorado muy fino producido en los sacos de polen de las flores macho.
En la naturaleza, el polen es transportado a las flores hembras por el viento. Por su parte, en el cultivo indoor, el cultivador deberá recoger el polen de forma manual y aplicarlo en las flores de las plantas hembra al comienzo de su etapa de floración. Esto último es recolectado por criadores expertos en búsqueda de producir nuevas cepas.
¿Cuándo puedo recoger el polen?
Este es un proceso sencillo, te darás cuenta que los sacos están maduros y llenos de polen, una vez que encuentres algunas flores abiertas. De igual forma, puedes guiarte al observar sobre las hojas cercanas cierto polvillo amarillo.
Puedes optar por arrancar con cuidado ciertos sacos de polen, secarlos durante unos cinco días y guardarlos en una bolsa con cierre hermético. Una vez estén secos, sólo basta con agitar la bolsa y los sacos se abrirán liberando el polen. Luego de terminar el proceso, puedes desechar los sacos abiertos y resguardar el polvillo dorado.
Nota importante: recuerda no acercarte a las plantas hembra que no quieres que sean polinizadas luego de recoger el polen o estar cerca de flores macho. Podrías polinizarlas, dañar tu cosecha y perder el preciado tiempo que le has dedicado a tus plantas.
Si no quieres que el polen se dañe, deberás asegurarte de mantenerlo lejos de la humedad, preferiblemente dentro de una bolsa hermética nueva. Algunos meten una bolsa hermética dentro de otras, lo que permite una mejor y mayor protección. Con esto, podrás guardarla dentro del refrigerador algunos días, e incluso, guardarlo en el congelador hasta cerca de un año.
¿Cómo funciona el Polen en las plantas hembra?
Los cogollos en su segunda o tercera semana de floración, cuentan con estigmas o “pelos blancos“, que sirven como receptores naturales para atrapar el polen en el viento. Por lo tanto, deberás rociar el polen recolectado sobre estos, puedes hacerlo mediante el uso de un pincel. Con esto, quedarán polinizados y lograrás que los cogollos desarrollen semillas que podrás recoger y utilizar para cultivos futuros.
Algo importante es que sólo las zonas de cogollos que entren en contacto con el polen desarrollarán semillas. Por lo que puedes polinizar una planta con polen de diferentes machos para obtener diferentes cruces de cepas, o aplicar polen de un mismo macho en toda la planta hembra.
Otra forma de polinizar a tus hembras es meramente colocar una planta macho junto a la hembra y sacudirla un par de veces al día durante unos tres días. Con esto liberarás el polen en el aire, con lo que la planta hembra se polinizará sin ningún problema.
¿Cómo recoger las semillas?
Una vez fecundadas tus plantas hembra, deberás esperar unas 4-6 semanas a partir del último día del proceso de polinización. Debes saber que los cogollos polinizados tienen un aspecto muy diferente a los cogollos “sin semilla”, ya que no suelen tener muchos tricomas y no forman colas tan grande, siendo generalmente más pequeños y bulbosos. Debido a esto, podrás ver cómo se hinchan los cálices en los cogollos polinizados, mostrando que dentro de ellos se encuentra una semilla.
Luego de transcurrir 4 semanas desde la polinización, podrás comprobar si tus semillas ya están listas para tu cosecha. Sólo deberás extraer una semilla de un cogollo polinizado y apretarla entre tus dedos. Las semillas maduras poseen una cáscara dura y son de color marrón, algunas de ellas incluso poseen franjas atigradas en la capa exterior. En caso de que no concuerden con la descripción, se vean transparentes, blanquecinas o verdes, deberás dejar que tu planta se desarrolle un poco más. Algunas plantas de cannabis sólo desarrollan sus semillas completamente hacia el final de su ciclo de floración.
Una vez maduras, podrás cosechar los cogollos de tu planta y extraer tus preciosas semillas de cannabis para un futuro cultivo. Recuerda almacenarlas en un lugar fresco y seco para que las mismas duren meses, incluso años. O por el contrario, podrás germinarlas de forma inmediata para cultivar nuevas plantas. Si quieres atreverte a más, puedes aprender a hacer Harina de Cannabis.