Curado y almacenado del Cannabis: Obtén cogollos de Calidad

Luego de haber llevado tus flores por el cortado, manicurado y luego por el proceso de secado, viene la parte más delicada y de mayor importancia para que tus flores mejoren o pierdan su calidad: el proceso de curado.

El curado es el proceso en el que ocurren dos sucesos: por una parte se elimina el resto del agua estructural de los cogollos y se permite una descomposición de la clorofila más profunda.  Por otra parte, durante este proceso se dan a cabo las reacciones de maduración de los terpenos y cannabinoides presentes en tus flores. Siendo ambos sucesos de gran importancia respecto a la calidad final de tus flores.

¿Por qué debo curar bien mis cogollos?

Si bien la clorofila ayuda a que las plantas obtengan energía para su crecimiento, también resulta que luego de cosechar, la clorofila es la encargada de que tus flores tengan un sabor rasposo y a pasto fresco. Esto lo convierte en un elemento que debe ser eliminado sí o sí, para  catar bien todas las notas presentes en tus flores de cannabis. Por otra parte, si no curas bien tus cogollos, terminarás por tener una cosecha final de flores llenas de enfermedades fúngicas, y miles de toxinas, todas nocivas para tu organismo y tus pulmones.

Esto quiere decir que el curado es un paso totalmente necesario si quieres que tus flores sean aptas para el consumo, tengan una calidad premium y prevalezca en ellas un buen sabor y aroma.

El proceso de curado, debe durar como mínimo unas tres semanas (algo que no recomendamos). Ten en cuenta que mientras más tiempo de curado, más intensidad, en sabores y potencia, por lo que en CANNALAND te recomendamos como mínimo un mes y medio de curado. Recuerda que tardará mayor o menor tiempo dependiendo de dónde y con qué método lleves a cabo la cura de tus flores.

Siempre que mantengas un proceso de curado del mínimo de tiempo recomendado por nosotros, te aseguramos que la mayor parte de la clorofila será degradada, y que los tricomas terminarán de madurar de forma satisfactoria. Es importante recordarte que durante este proceso (y posteriormente), también deberás evitar la luz directa sobre los cogollos. Recuerda que la luz es capaz de degradar los terpenos y cannabinoides muy rápidamente.

¿Dónde debo realizar el curado de mis flores?

Botes de vidrio

Lo más fácil y útil que puedes hacer, es realizar el curado en botes de vidrio opaco con tapa hermética, lo que te servirá para evitar el paso de la luz hacia las flores. La ventaja de este método, es que el curado en estos recipientes otorga mayor grado de estanqueidad, lo que ayuda a retener mejor el aroma de tus cogollos. Sin embargo, con este método es más probable que tus flores contraigan algún tipo de hongo por el mismo motivo. Por lo que deberás estar más atento a cambios, o a la aparición de algun tejido parecido a polvo o lana.

Caja de Madera

Si eres un poco más experimentado, y quieres aumentar la calidad de tus flores, tendrás que conseguir una caja de madera sólo pulida. Evitando a toda costa tratamientos como la cera, barniz, u otro acabado que pueda entrar en contacto con los cogollos.

Esta mejora en la calidad se debe a que la madera es un material higroscópico, esto significa que tiene la capacidad de ceder y/o absorber humedad, permitiendo así que exista un balance. Este balance permite que tus cogollos tengan un mayor tiempo de almacenaje, evitando así la formación fúngica. Sin embargo, la intensidad de los aromas no será tan notoria como en los frascos de vidrio ya que la madera no posee la misma propiedad que estos.

Cualquiera de las opciones que elijas, deberás tener en cuenta que los cogollos seguirán liberando humedad durante las primeras semanas. Por lo que deberás prestar atención a ambos métodos por igual, lo que significa mantenerlos vigilados ante cualquier cambio y que permanezcan bien aireados. Para esto último, lo recomendado es destapar el contenedor, dejar salir el aire húmedo interior durante unos pocos minutos y volver a cerrar.

¿Qué cuidados debo tener durante el cuidado?

Bien sea que realices el proceso de curado en botes de vidrio o en cajas de madera, debes seguir ciertos pasos para garantizar un curado de flores óptimo y mantener la calidad. A continuación te dejaremos el paso a paso, y la frecuencia para la renovación del aire en el espacio de curado.

• Durante la primera semana, es recomendable que airees tus flores como mínimo una vez al día, destapando el contenedor durante unos dos minutos. Recuerda evitar en todo momento del proceso que las plantas reciban luz solar.
• Durante la segunda semana, ya debe de haber salido una buena cantidad de humedad y haber comenzado el proceso de curado a nivel químico. A partir de ahora, deberás reducir la frecuencia de aireado para ayudar al proceso de curado, por lo que recomendamos hacerlo una vez cada tres días.
• Al comienzo de la tercera semana, ya debe haber salido la mayor cantidad de humedad, pero el proceso de curación sigue activo. Por esta razón, a partir de esta semana y en adelante, te recomendamos renovar el aire una vez a la semana, destapando el contenedor durante unos cinco a diez minutos, y luego volviendo a cerrarlo hasta la semana siguiente.

Almacenaje del cannabis

Si en algún momento has dejado flores almacenadas y sin tocarlas durante un tiempo, podrás notar que se han ido secando y algunas veces pierden las propiedades y la potencia que tenían en un principio. Esto es algo común, Y aunque es inevitable, podemos retrasarlo Sí sí realizamos un buen almacenaje.

Una vez que los cogollos envejecen, tienden a perder su potencia, esto sucede porque los cannabinoides se degradan y pierden su efectividad. Por ejemplo, si tus flores son altas en THC, puede que el mismo se convierta en CBN, qué realmente es psicoactivo, pero no tiene la misma potencia que el THC por lo que no sentirás la misma euforia. Esta degradación o conversión ocurre cuando las flores se exponen demasiado al oxígeno y al calor a través del tiempo.
Además de la pérdida de cannabinoides, tus flores pueden perder su sabor y su olor si lo guardas en algún lugar caliente, por lo que además de potencia perderá sabor, olor, y tendrá un humo más desagradable.

En resumen la humedad, la luz y la temperatura son los que más estragos causan en el proceso de almacenamiento del Cannabis. Existen algunas personas que guardan sus flores en contenedores de plástico, sin saber que este material afecta directamente al envejecimiento de las flores, ya que puede hacer que las mismas suden. Con lo que liberarán mayor porcentaje de humedad y terminarán por quedar completamente secos.

por el contrario, si realizas un curado adecuado como el que acabamos de recomendarte en CANNALAND, ya tienes una gran parte cubierta al momento de almacenar. Esto se debe a que el almacenamiento comienza desde el momento de curado, y al tener un proceso de curado óptimo, y con las condiciones propicias, tus flores podrán mantenerse frescas durante mucho más tiempo.
Lo mejor que puedes hacer para el curado y almacenado de tus flores, es colocarlas en un frasco de vidrio opaco y colocar dentro de ellos los sachets de bóveda desde el inicio del proceso de curado. Pueden durar hasta 4 meses, y mantendrán dentro del contenedor una humedad del 58 al 62%. ¡Puedes adquirirlos haciendo click aquí!

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