Las flores del cannabis cuando están en su punto, están cubiertas de pequeñas estructuras con forma de hongo de color blanquesino, llamados Tricomas. Estos son los encargados de contener la resina que posee la mayor concentración de cannabinoides esenciales y terpenos. Compuestos que al recibir un estímulo de calor, son los responsables de causar efectos en el cuerpo humano. Antes de continuar, debes conocer la diferencia existente entre el Kief y el Hash. Lo primero que debes saber es que el Kief es una colección de tricomas extraídos de la planta de cannabis. Es un concentrado seco con apariencia arenosa que puede tener diferentes colores. Por su parte el Hash es el la denominación que recibe la masa de kief una vez que es calentada y comprimida.
Entonces, ¿Qué es el Kief?
El Kief, también llamado “polen“, es una preparación que se obtiene tamizando o separando las puntas de los tricomas de las inflorecencias. Es decir, separas todo los ingredientes que pueden causarte algún efecto de las flores, resultando un producto con mucha más pureza. Se caracteriza por ser un concentrado de diferentes colores dependiendo de su pureza, que va desde el color blanco opaco hasta ambar oscuro o verdoso. Bajo este orden, el Kief se extrae preferiblemente en distintas fases para no contaminar el concentrado más puro, siendo este de color blanco opaco, mientras que a medida que se reduce su pureza, va cambiando su color.
Beneficios del Kief
Por un lado, debido a la potencia y pureza del Kief, necesitarás una menor cantidad para lograr el mismo efecto que con la flor. Gracias a esto también reducirás la necesidad de inhalar el material vegetal carbonizado, que también posee gases tóxicos al igual que cualquier otra actividad que implique fumar.
El consumo de este concentrado, te permite percibir con mejor precisión el sabor y efecto de una variedad en específico. Debido a que no tienes productos de terceros, sino únicamente consumirás los cannabinoides y terpenos contenidos n los tricomas de las flores.
¿Cómo se extrae el Kief?
Actualmente existen distintas formas de producir el Kief de una forma sencilla, a continuación te daremos algunas opciones para lograrlo:
Grínder (Moledor de mano).
El grinder es una herramienta compacta, que normalmente tiene dos mitades que se separan, internamente poseen dientes afilados y alineados. Cuando el moledor se cierra y se gira, el material del interior termina por ser triturado. Actualmente existen algunos de estos con tres cámaras, donde la última cámara de la parte baja posee una malla que filtra los tricomas que se desprenden. Cuando el material llega a la cámara media, el resultante en la cámara inferior son cristales puros, siendo este el Kief. Esto se utiliza cuando son pequeñas cantidades de cannabis que se van a moler, por lo que se obtienen pequeñas cantidades de Kief.
Tamiz en Seco.
Si esperas hacer una cantidad grande de Kief, el tamizado en seco es uno de los mejores métodos para extraer los tricomas de grandes volúmenes de material vegetal. Esto se debe a que no requiere un equipo industrializado, sin embargo su mano de obra si puede ser pesada.
Se trata de una caja cuadrada o rectangular que posee diferentes cámaras con mallas de diferentes micrones para cada una. la mayoría utiliza mallas de entre 80 hasta unos 270 micrones de ancho para los tamizajes. Estas mallas se encargan de filtrar los tricomas que irán pasando a través de ellas, dejando el material vegetal en la parte superior. Mientras mayor sea la densidad de la malla, de mayor calidad será el Kief, también deberás tomar en cuenta la fuerza y el tiempo de agitación. Una recomendación a la hora de utilizarlo, es tomar en cuenta la temperatura del ambiente. Debido a que si es demasiado elevada, la resina será demasiado pegajosa para pasar por el filtro, quedándose impregnada en la malla.
Hielo seco.
Cuando una sustancia aceitosa reduce su temperatura, se enfría, endurece y vuelve quebradiza. Nos basaremos en este mismo principio, colocaremos las flores secas y sin moler en cualquier recipiente junto a trozos de hielo seco. Sobre el que colocaremos una malla mayor a 150 micras que la cubra por completo y se le dará la vuelta. Al hacer esto y sacudir el contenedor, verás como los tricomas comienzan a romperse y separarse del material vegetal.
Ahora, ¿Qué usos tiene el extracto?
A continuación te enseñaremos las mejores formas de utilizar el Kief, comenzando por las más fáciles.
Fumar el Kief.
Éste es el método más fácil de consumir el Kief, que es si bien usando un Bong o enrollar y fumar el Kief por sí solo. Aunque para esto te recomendamos utilizar algún protector para que no suba por la pipa o lo inhales por accidente al fumarlo.
Consejo extra: Puedes usar un poco de la flor del cannabis cerca al inicio, cerca de tu filtro para evitar que se pase 😉
Vaporizarlo.
Si decides usar este método, debes recordar que los tricomas que contienen los cannabinoides y terpenos son bastante volátiles respecto al calor. Por lo que en este caso, te recomendamos utilizar un poco de las flores para cubrirlas con kief al vaporizar, con la finalidad de que se calienten a la temperatura ideal.
Añadirlo al Café o té.
Si quieres iniciar un día bastante feliz (If you know what I mean), deberás recordar que debes descarboxilar los tricomas, si no sabes cómo hacerlo, acá te dejamos el link. Luego de esto, sólo tendrás que añadir un poco de tu resultado al café o té para que aparte de mejorar su sabor, tenga un toque relajante o energizante.
Hacer Hash.
Como te explicamos anteriormente, el Hash se obtiene una vez que el Kief se calienta y comprime. En otras palabras, sólo deberás aplicar calor y Presión. Por lo que la forma más fácil de hacerlo es con los dedos. ¡Sí! Con los dedos. Deberás tomar el Kief entre tu dedo índice o medio y el dedo pulgar, haciendo fricción durante unos minutos. Dando como resultado una masa compacta, que será básicamente un trozo oscuro de Hachís o Hash.
Añadir a un Blunt o a un Porro.
Tienes dos formas de añadirle el Kief a tu porro para darle un extra de potencia. La primera es simplemente espolvoreando un poco dentro del mismo una vez que lo estás preparando. Si eres fumador ocasional, con sólo un poco bastará.
La segunda, es que cuando ya tengas armado un Blunt, impregnarlo por fuera con un poco de aceite cannabico y luego espolvorear el Kief, creando así una capa al rededor de este. Este método le da un toque muy llamativo (¡Y muy potente).
Hacer Moon Rocks.
Este proceso es un poco más complicado, sin embargo con paciencia y un poco de pericia y delicadeza, podremos hacer unas Moon Rocks muy buenas y con bastante potencia. Recuerda que las Moon Rocks pueden hacer lo que su nombre indica, llevarte hasta la luna. Se hacen tomando flores secas, y cubriéndolas con aceite de Hachís formando una masa compacta. Luego de esto simplemente son cubiertas con Kief, ¡Como si de un empanizado se tratara! ¡Y listo! Ta tienes bien logradas tus Moon Rocks para ponerte extra planetario.
Recuerda ser precavido con las cantidades, debido a que su potencia es realmente alta. Esperamos que estos métodos para utilizar el Kief te sirvan en tu próximo viaje, ¡Buenos humos!