Defoliación del Cannabis, ¿Qué es y para qué sirve?
La defoliación del Cannabis es una técnica de cultivo basada en eliminar ciertas hojas estratégicamente para mejorar el crecimiento de la planta. Esta técnica ha sido perfeccionada con los años, y se ha utilizado mayormente para definir en el arte del bonsái.
Cabe destacar que este método también genera una cantidad considerable de estrés, ya que es una técnica agresiva, al igual que la Poda Apical. En Cannaland, queremos que conozcas todas las técnicas de cultivo, sus pros y sus contras, por lo que en esta ocasión te explicaremos cómo se aplica esta poda.
En el cultivo de cannabis, lo que buscamos es maximizar la producción de las plantas en espacios reducidos, o con pocas plantas. Por lo que aplicar la defoliación puede ser atractivo para la mayoría de los cultivadores, siendo así una técnica bastante utilizada y con buenos resultados.
Recuerda que defoliar y podar son dos conceptos distintos, ya que en defoliación sólo se eliminan hojas. Durante la poda, se va un pco más allá y se eliminan ramas secundarias pequeñas, para que la energía de estas se distribuya a las principales o más grandes. Si quieres conocer un poco más sobre la poda, haz click aquí.
¿En qué consiste la Defoliación del Cannabis?
Básicamente, la defoliación es eliminar entre un 25% y un 85% de las hojas totales de tu planta que impiden que la luz llegue a las flores en formación. La finalidad de la defoliación es modificar la estructura de la planta en su fase vegetativa, para eliminar partes que puedan ralentizar la producción. Este proceso mejora la producción final de flores, debido a que la luz fluye mejor hacia los cogollos bajos. Dando como resultado un crecimiento explosivo y efectivo, mayor producción de tricomas, y además mejora el aspecto de la planta y sus flores. Proporcionando así una mayor calidad y cantidad en la cosecha. Algo que debes tener muy en cuenta, es que una planta enferma, o poco sana, difícilmente se recuperará de una defoliación.
Objetivos de la Defoliación.
Entre los objetivos que se buscan realizando esta técnica, y los resultados que obtienes son los siguientes:
- Mejorar la exposición a la luz de toda la planta.
- Evita las plagas y hongos por el exceso de humedad.
- Causar estrés significa que la planta intentará defenderse por lo que fortalecerá ciertas áreas, y creará mayor cantidad de tricomas una vez entre a su estado vegetativo.
- Manipular el crecimiento, altura y forma de tus plantas a tu favor.
- Propicia el tamaño, densidad y uniformidad de tus cogollos.
- Potenciar la productividad de tus plantas.
¿Cómo aplicar la defoliación en nuestras plantas?
Normalmente, cuando notamos una hoja amarilla o dañada, instintivamente buscamos arrancarla inmediatamente. Sin embargo, durante una defoliación es un poco más intensa, debido a que eliminaremos este tipo de hojas. Y también eliminaremos algunas hojas nuevas, siendo en su mayoría hojas de abanico que tapan las ramas medias para que la luz penetre y el aire circule. Este proceso es algo que también ayuda a controlar la humedad y mantener lejos ciertos hongos patógenos.
Fase Vegetativa.
Durante la fase vegetativa optaremos por realizar una sola defoliación, una vez que alcance unos 30 cm de altura. Cortando sólo las hojas más grandes y dejando suficientes hojas para que realice la fotosíntesis. El corte causa un desequilibrio, y deberás esperar a que se recupere por completo y la planta establezca un nuevo equilibrio. Es importante saber que para que la planta se recupere sin problemas, deberá contar con una gran cantidad de nutrientes disponibles.
Fase de Floración.
A partir de la segunda semana de floración, cuando ya se hayan formado por completo unos cuantos pístilos, deberás cortar la mayor cantidad de hojas de abanico que puedas. Dejando así las hojas más pequeñas intactas, para que continúe creciendo. Verás como luego de unos cuatro días las hojas comienzan a brotar de nuevo. Y al cabo de unos diez días ya tendrás de nuevo bastante espesura foliar y cantidad de hojas.
Entre la tercera y cuarta semana de floración, deberás asegurarte que tus plantas se hayan recuperado y estén frondosas, comenzando a crear cogollos. Donde repetirás el proceso de cortar las hojas, evitando zonas con sombra y exponiendo todos los cogollos inferiores. Deberás tener especial cuidado de cortar muy cerca de los cogollos, a no ser que la cantidad de hojas sea muy densa. Esto se debe a que podrías cortarlos y estresar en gran medida tu planta en esta etapa crítica, disminuyendo tu producción.
Durante la fase de floración, al cortar las hojas se estimula la producción de auxinas, hormona encargada de la elongación de las células y maduración. Siendo así, que cuando la planta se recupere, los cogollos comenzarán a crecer de forma acelerada, hinchándose muy rápido.
No todo son beneficios.
Al aplicar esta técnica debes tener nociones del crecimiento de las plantas, debido a que el estrés de una constante defoliación, o una mal hecha, resultará en unos cogollos menos densos, sin energía suficiente y por consecuencia, una baja calidad.
Deberás tener en cuenta los factores mencionados para lograr que tu cosecha aumente realmente, y evitar ser practicada por principiantes. ¡Saludos! y ¡Buenos humos!