Marihuana Medicinal

CBD Medicinal para Mascotas

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Cannabis medicinal en mascotas

No toda la exposición a la marihuana es mala para las mascotas. De hecho, existe un enorme mercado emergente que gira en torno al CBD para animales. La presencia del sistema endocannabinoide en mascotas es la razón por la que grandes dosis accidentales de THC pueden ser potencialmente peligrosas. También es la razón por la que las personas consumen CBD para fomentar el bienestar de sus amigos peludos. Debemos recordar la diferencia existente entre el THC y el CBD, para tener más información al respecto, puedes hacer click aquí.

El cannabidiol o CBD, es un cannabinoide no psicotrópico que está ganando terreno en el (relativamente nuevo) mundo de los premios para mascotas. Sin embargo, no se sabe mucho sobre los efectos concretos de las moléculas de cannabis en la salud de las mascotas. Esto significa que lo mejor que puedes hacer cuando quieras dar CBD a tus mascotas es consultar al veterinario.

Se ha observado gran éxito en el tratamiento del dolor y convulsiones, especialmente las refractarias en perros, que son aquellas convulsiones de “difícil tratamiento”.

 

Mascotas

Si mi perro o gato tiene alguna afección o dolor, ¿Puedo darle aceite de CBD?

Si es así de golpe, la respuesta es no. La dosis y la composición del tratamiento deben adecuarse a las características específicas del paciente y su enfermedad. Por lo tanto, todo tratamiento debe ser indicado por un médico veterinario. Incluso los productos que se venden con receta médica retenida, pueden no ser recomendables para todas las mascotas. En general, estos productos destinados al humano, tienen mayores concentraciones de las que necesitaría un perro o gato. Por lo que deben ser analizados desde el punto de vista químico inicialmente.

 

Si una persona fuma cerca de su mascota, ¿El humo puede afectarle?

Absolutamente sí. Las mascotas se vuelven fumadoras pasivas al igual que las personas, y reciben la misma cantidad de cannabinoides activos que la persona que está consumiendo en un lugar cerrado. Sin embargo, al ser más sensible, el perro, la probabilidad de intoxicación es muy alta.

De hecho, la mayor cantidad de casos son intoxicaciones accidentales, ya sea por que la mascota inhala el humo, o por consumo de consumibles que hace la gente, donde no se controla la cantidad ni concentración que tienen.