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Beneficios del CBD en niños, puede ayudar en las siguientes afecciones:

• Hiperactividad

• Ansiedad

• Insomnio

• Autismo

• Asma

• Falta de concentración

• Epilepsia

¿Es seguro el uso de CBD para niños?

Hasta la fecha existe mucha controversia en torno a los productos que se elaboran con extractos de marihuana, por los usos recreativos de esta planta. Sin embargo, cada vez son más los estudios que demuestran la seguridad del uso del Cannabidiol. En pediatría, se emplea principalmente en pacientes con epilepsia, con medicamentos como el Epidiolex.

Entre algunas de las aplicaciones que se pueden encontrar están diversos trastornos inflamatorios, convulsivos o problemas neurológicos. El CBD les aporta alivio a los infantes, así como bienestar físico y mental.

Últimas investigaciones sobre el CBD para niños 

Los beneficios del cannabidiol son múltiples. Por eso, aumenta el interés y las investigaciones para conocer los posibles efectos adversos que este compuesto puede tener en los más pequeños, aunque aún no se ha comprobado la eficacia o seguridad del mismo. Sin embargo, debido a los resultados obtenidos hasta ahora la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha opinado positivamente sobre su uso, al considerar que no genera tolerancia ni adicción y que los efectos secundarios son mínimos.

Algunos de los estudios sobre CBD para niños son las siguientes:

• Epilepsia:  el cannabidiol ha sido objeto de numerosos estudios clínicos para evaluar su eficacia en el tratamiento de la epilepsia, especialmente en niños con síndrome de Dravet y síndrome de Lennox-Gastaut. Éstos han demostrado que el CBD puede reducir la frecuencia y la gravedad de las convulsiones.

• Trastornos del sueño: algunos estudios han explorado el uso del CBD en niños con trastornos del sueño, como el insomnio o el trastorno del sueño REM. Aunque los resultados son prometedores, se necesita más investigación para comprender completamente los efectos.
• Trastornos del espectro autista (TEA): existen investigaciones preliminares que sugieren que el CBD puede ayudar a reducir los síntomas asociados con el TEA en algunos niños.Sin embargo, se requieren más estudios para confirmar estos hallazgos y determinar las dosis adecuadas.

• Ansiedad y trastornos del estado de ánimo: ciertos estudios han investigado este posible uso del CBD en niños con ansiedad y trastornos del estado de ánimo, aunque se necesitan más investigaciones, algunos informes  sugieren que el CBD puede ayudar a reducir la ansiedad.

Usos del CBD en pediatría

Entre los motivos más comunes por los que los padres utilizan los productos a base de CBD se incluyen:

• Alivio o prevención de las náuseas antes de un viaje largo en coche (esto no funciona con todos los niños)
• Como alternativa para el tratamiento del dolor leve (el dolor más intenso debe tratarse con las opciones más adecuadas disponibles).
• Para aliviar la ansiedad
• Niños que experimentan insomnio.
• Alivia síntomas de afecciones epilépticas.
• Relajando los pulmones y aliviando la tos.
• Controlar la inflamación y ciertas enfermedades autoinmunes.

CBD en niños con autismo

El CBD puede ser clave para niños con autismo, al mejorar el estado de ánimo de los niños. Así, diversos estudios realizados han demostrado una mejora sustancial en:

• Estallidos temperamentales
• Ansiedad y problemas de comunicación
• Reducción para los niveles de estrés reportados

Aunque aún es necesaria una mayor investigación sobre el tema se tiene que estudiar estos beneficios y sus posibles efectos secundarios.

Aceite de cannabidiol para la ansiedad en niños

Son muchos los estudios que se han llevado a cabo sobre el aceite de CBD y la ansiedad. Si bien la mayoría se han realizado en adultos, sus efectos en niños también han quedado demostrados. El CBD para niños con ansiedad puede ayudarles a relajarse, debido al impacto del CBD ante la respuesta de la ansiedad.

Estos estudios se han realizado sobre todo en trastornos de la ansiedad generalizada, TEPT, trastorno de pánico, ansiedad social o TOC.

Cómo utilizar el CBD para niños

A la hora de elegir el producto con CBD que mejor funcione en los niños para así evitar posibles riesgos. Entre ellos se encuentran:

• La calidad del producto. Hoy en día existen muchos productos pero no todos son fiables, pudiendo contener más o menos cantidades de CBD y THC de las que indican, así como contar con partículas de metales pesados, pesticidas o microbios. Por otro lado, el Cannabidiol es un componente químico, el cual puede extraerse de la planta de Cannabis sativas o de la planta de cáñamo. La diferencia entre ambas está en la resina que contienen. El CBD se encuentra en esta resina y aunque las plantas de marihuana tienen más, estas poseen un mayor porcentaje de THC. Por ello, se recomienda que se utilice un CBD aislado, lo cual asegura que se encuentre libre de THC.
• Biodisponibilidad del producto. Al hablar de biodisponibilidad, se hace referencia a la fracción de componentes que llega a la circulación sistémica. Esta depende del método elegido y la cantidad que se tome.
• Interacciones con otros medicamentos. Aunque se considera seguro, puede suponer un problema cuando interactúa con otros medicamentos que se tomen. Por ello, es recomendable hablar con el pediatra antes de comenzar a usarlos.
• Potencia. Es aconsejable el uso de productos con una potencia baja.
• Aumento progresivo de la dosis. Empezar con una cantidad baja e ir aumentando de forma progresiva, siempre observando las reacciones que muestra el niño ante la sustancia. Lo ideal es utilizar al empezar una pequeña cantidad de uso tópico para comprobar que no desarrollan ningún tipo de alergia.